miércoles, 21 de enero de 2015

Típico pero sincero: te echo de menos.

No puedo evitar quedarme paralizada al oír tu voz.
Se me acelera el corazón, y en la garganta se forma un nudo.
Porque no quiero perderte, ni tampoco que me olvides.
Aunque lo veo como algo inevitable.
Ojalá encontrase la forma de permanecer en ti.
Pero con mi mala suerte y tu dulzura,
estoy completamente segura de que te enamorará alguien
y no seré yo.

¿Cómo voy a dejar que se pierda algo tan bonito?
Con lo complicado que es encontrar a alguien
que me haga sentir como me haces sentir tú.
Para una vez que la suerte me da una oportunidad,
no quiero fallarle.

No dejo de pensar en ti.
No puedo... Tampoco quiero.
Aunque siento que voy a salir hecha pedazos.
Porque estaba viviendo un sueño,
sin querer ser consciente de que iba  a despertar.
Pensando, como ahora deseo todas las noches,
que al amanecer estarías a mi lado.

Y, ahora, no dejo de torturarme
pensando en si existirá siquiera otra madrugada contigo,
y en la lejanía de esta.
No dejo de envidiar a esa chica desconocida que, un día cualquiera,
se pondrá tu sudadera de color vino
y te rozará la espalda...

Ojalá tuviese valor para decirte que, como bien dices tú,
"nadie te va a besar como yo."

Ojalá leyeses este típico pero totalmente sincero "te echo de menos".

Ojalá estuvieras aquí ahora mismo.



No hay comentarios: