sábado, 10 de octubre de 2015

Entre tú y yo, casi hemos muerto.

Entre tú,
que lo arreglas todo con silencio,
y yo,
que es imposible callarme cuando siento.

Entre los dos,
formamos un avión
cayendo en picado,
dirección al suelo.

Podríamos salvarnos,
pero habría que ser valientes.
Nos faltan besos de buenas noches,
caricias en la espalda, miradas cómplices...

Hace días que desconoces.
No sabes si mis ojos han llovido, ni por qué.
Hace tiempo que te desconozco.
Por más que te busco, sólo encuentro indeferencia.

Es cierto,
ni siquiera vemos
el mismo mar desde la ventana.
Pero accedimos a esto.

Yo en un mar de dudas,
casi ahogada por la incertidumbre.
Tú en un mar de respuestas
que no me quieres dar.

Ahora que no nos cae la misma lluvia,
parece que tus te quiero
son producto de la costumbre.
Te quiero por rutina. Por romper el hielo.

Sigues ausente.
Ninguna palabra puede hacerte reaccionar.
Nos acabaremos estrellando,
te toca a ti coger los mandos.

No hay comentarios: