para volver como tú:
con los ojos inundados de ganas,
y una victoria en cada yema de los dedos.
Has derrotado al tiempo,
que cobarde corre en tu presencia.
Y has derrotado a la distancia,
restándole importancia, ganándotela tú.
Cuando todos sacan sus armas,
tú desenfundas tu sonrisa,
mostrando tu fondo, lo más profundo de ti,
en forma de terraza con vistas al mar.
Y, así, enamoras hasta a los pájaros.
Que hacen cola para anidar en tu pecho,
que saben que la vida es corta,
y que tú puedes parar relojes.
No les culpo,
yo estoy deseando
ver tu fondo en mi sofá.
Y verte a ti con mi sofá de fondo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario